18/01/2021
Así como los ojos son el espejo del alma, una sonrisa sana y bonita es un reflejo de nuestra salud bucodental. Por eso tenemos que cuidarla correctamente, y un primer paso es el de escoger un buen dentista que se preocupe por nosotros y nos acompañe en todo ese proceso que nos proporcionará una salud perfecta.
Si estás buscando al mejor dentista en Palma de Mallorca, desde Fàbregues Centro Odontológico Avanzado te contamos los criterios que debes valorar para hacer una elección adecuada:
- Profesionalidad del equipo y experiencia previa. Es esencial que el dentista que escojas esté altamente cualificado para obtener diagnósticos correctos y un tratamiento que beneficie a tu salud bucodental. Los profesionales que te atiendan deben pertenecer a un Colegio de odontólogos y estomatólogos, ya que así acreditan que pueden ejercer la profesión. Además, el personal higienista y auxiliar debe estar correctamente titulado.
- Priorización de la prevención. El profesional debe evitar que aparezcan problemas mayores. Por ello, un buen dentista te asesorará en higiene bucodental y te recomendará revisiones regulares, evaluaciones de oclusión o limpiezas profesionales, entre otros.
- Trato correcto con el paciente. Tu dentista debe tener un trato humano y explicarte todos los tratamientos y sus alternativas (si las hubiera) con cercanía y confianza, poniendo en valor la salud de los pacientes por encima del beneficio económico.
- Especialización en cada tratamiento. A pesar de que la titulación en España es única (Odontología), recomendamos escoger profesionales que se hayan formado a través de cursos o postgrados en alguna especialidad. Esto acompañará a su experiencia acreditada para asegurar los conocimientos necesarios de cada tratamiento.
- Pasión por la innovación y la calidad. La tecnología es de gran importancia en el campo de la odontología. Por eso, la clínica que escojas debe tener los instrumentos y material necesarios para llevar a cabo tus tratamientos de forma óptima y sencilla tanto para ti como para el profesional. El fin último siempre debe ser la calidad.
- Prioriza tu salud por encima del coste. A pesar de lo atractivo que puede resultar un tratamiento con un precio especialmente reducido, es necesario que tengas en cuenta que pueden resultar en tratamientos incompletos o con materiales de mala calidad. Al final, lo barato siempre sale caro y es posible que intentar abaratar costes resulte en tratamientos más costosos en el futuro.